Esta mañana, nos hemos citado con representantes de X-Elio, la empresa promotora de la planta solar en Zarcilla de Ramos, que vuelca su energía en la subestación de Totana. En ella, nos han acompañado Jose Antonio Heredia y Marcos Vivancos (miembros de la Plataforma AATT Lebor-Ñorica) y Marcos (Ingeniero técnico).
Tal como se decidió en la asamblea del pasado jueves, nuestra petición es decidida: Que la línea, a su paso por Totana, sea soterrada en todos los puntos en los que sea posible, trabajando junto a la empresa en todo lo necesario cediendo terreno de caminos municipales, y en cualquier caso yendo de la mano para que vea la luz un proyecto que sería ejemplar para todos los que estén por venir.
La disposición de la empresa ha sido total a escuchar y asumir la propuesta soterrada que, teniendo en cuenta las afecciones a la línea ferroviaria de ADIF y a CHS (Rambla de Lébor), trabajará en conjunto el ayuntamiento y la plataforma la próxima semana.
En un mar de meses de hastío y sinsabores con ADIF y su línea de 400 KV, encontrar la predisposición de X-Elio a escuchar las peticiones de Totana es agua en el desierto. Una empresa que si está teniendo en cuenta a los vecinos de Totana, sus necesidades y las graves consecuencias que tendría acumular líneas aéreas en el Guadalentín. Mi más profundo agradecimiento y reconocimiento a X-Elio en los esfuerzos realizados hasta ahora.
Ahora toca preguntarnos.¿Qué habría sido de este proyecto, si no se hubiera constituido la plataforma Totana-Aledo para oponerse al mismo, y no hubiera contado con el empuje de cientos de personas? Pues que hoy día, una línea de 400 KV cruzaría el paraje de Sierra Espuña y el valle del guadalentín, a la que vendría a sumarse la existente y la de ADIF.
¿Qué tenemos en la actualidad, gracias a luchas, cambios, días en vela, alegaciones y el trabajo de plataforma y ayuntamiento? Una línea de 132 KV, que recorrerá los 12 kilómetros del campo de Lébor y La Ñorica de manera soterrada hasta la subestación (Salvo el cruce con el tren y la rambla).
¿Sirven entonces las luchas? El ejemplo claro lo tenemos aquí. Totana tendrá un ejemplo de línea de alta tensión, completamente soterrada, que servirá de ejemplo a todas las que estén por llegar.
Una victoria al alcance de la mano, que por desgracia llega en días de lamentos por la injustificable acción de ADIF sobre las propiedades de los vecinos de la misma zona. Pero del mismo modo que hemos luchado y hemos ganado esta batalla, aún no hemos dicho nuestra última palabra con ADIF.
Mientras siga la lucha, irán llegando las victorias.
